miércoles, 23 de abril de 2014

El principio del Caballero Oscuro (parte 2ª)

¿Qué sucedió después de este descubrimiento? Esta es una pregunta que me haría como lector. Pues acaecieron los siguientes sucesos.

Unas semanas después me dirigí a la Escuela de Geología con la intención de que me clasificasen los hallazgos, que daba por sabido en mi absoluta y relativa ignorancia, no haría avanzar a la civilización, pero posiblemente podría añadir un poco luz a mi incultura geologil. El diálogo que tuve con la persona encargada del museo,  la cual por cierto, me miró con extrañeza, asombro o no sabría decir qué gesto gesticular que con su cara hizo, respondió a mis interpelaciones de las cuales a groso modo transcribo.

- Buenos días - le saludé para cortar el hielo, y también como punto inicial de cortesía.

- Buenos días - me contesto mientras me observaba, quizás preguntandose que coño hacía yo allí en aquellos momentos y pensando que de que le sonaba mi cara.

- Se acuerda, vine hace unos meses para que clasificase unos minerales, y como me había dicho que volviera cuando quisiera, pues es lo que hago. Espero no molestarlo.

- Ah si, si, si, ya lo recuerdo. Muy bien ¿qué me traes?- Pero qué coño hace este aquí. Tengo yo pocas cosas que hacer como para ponerme ahora a clasificar minerales. Si te dijese lo que pienso.

- Pues verá, aquí le traigo algunas piedras para que me ayude a clasificar - Parece que le molesta, creo que si me dijese lo que piensa, no volvería más aquí.

Puse mi bolsa llena de minerales encima de la mesa y empecé a sacarlos uno a uno. El lo miraba y me decía.

- Esto noes nada, esto tampoco, esto menos, y esto mucho menos...

1 comentario:

  1. Mi Querido y Estimado Señor Escritor:

    Me urge saber máaaaaaaaaaaaaaaaaas, máaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaas, máaaaaaaaaaaaaaas..

    Atentamente,

    Su Fiel y Anónima Lectora

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